Info General

Nuestros vecinos Diego Martínez y Agustín Sánchez acaban de regresar tras haber descargado un camión con más de 9.000 kg de ayuda en un almacén gestionado por el ejército cerca de Catarroja. Esperamos su llegada para asegurarnos de que todo saliera bien, después de que partieran esta madrugada en un viaje de ida y vuelta a Valencia, interrumpido solo por breves descansos. Han sido nuestros héroes sin capa, y queremos agradecerles especialmente el esfuerzo, porque sin ellos todo esto no habría sido posible.



Toda la ayuda que han llevado es fruto de la solidaridad y generosidad de los vecinos de los pueblos de la zona, en una iniciativa conjunta de los ayuntamientos de Cogolludo, Espinosa y Jadraque, en coordinación con Protección Civil de Cogolludo.



Aunque la cantidad de ayuda ha superado con creces las expectativas iniciales, sigue siendo solo una gota en el inmenso océano de necesidades de esta vasta zona destruida por la DANA, que ha golpeado la vida de decenas de miles de personas. Al mismo tiempo, es un extraordinario ejemplo de la calidad humana de nuestros vecinos, de nuestra capacidad de movilización y de la solidaridad desbordante que siempre demostramos cuando desde otros lugares de España necesitan nuestra ayuda.



Además de material de limpieza, alimentos y agua, este envío lleva consigo un mensaje de apoyo y esperanza para una población sumida en un paisaje de devastación, barro y desesperanza. Pasarán aún muchos días antes de que se recupere la normalidad, y levantarse tras una riada que ha arrasado tantas vidas, hogares, negocios, sueños y recuerdos no será fácil. Por eso necesitan nuestro impulso: para volver a ponerse en pie, para sentir que no están solos en su dolor y para encontrar en nuestros hombros un punto de apoyo más.



Y aunque no pesen mucho, los dibujos y cartas que han hecho los niños de Espinosa y Carrascosa para enviar ánimo y esperanza también llegarán a las manos de los niños de Catarroja. Estamos seguros de que les darán fuerzas para recuperar la sonrisa pues aunque todos sean victimas de la catástrofe, los niños lo son especialmente.



Nadie duda de que, como siempre en la vida, saldrán adelante. Y cuando eso suceda, podremos recordar con orgullo que, una vez más, cuando hacía falta, estuvimos a la altura. Gracias a todos los vecinos y a quienes colaboraron en la organización y a Espagreen por ceder su camión para trasladar la ayuda, porque en el fondo, el océano también está hecho de pequeñas gotas de agua.



https://photos.app.goo.gl/EVArQnm3qUo73sY38



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