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  • 26-Agosto-2023 20:35
    Deportes

    Hoy se ha celebrado el homenaje a D. Alfonso en el marco del triangular CD Jadraque-Proyecto Hombre-CDC Espinosa de Henares, en el que ha resultado ganador el CD Jadraque, al que damos nuestra más sincera enhorabuena. Pero lo más relevante de esta jornada ha resultado ser el sentido homenaje que tanto nuestro Club de Fútbol como el conjunto de los vecinos han querido rendir al que durante 20 años fue nuestro párroco y que tan honda huella dejo en todos los vecinos. El Presidente del Club, José Ortega pronunció las siguientes palabras,
    “Buenos días, está escrito que todo tiene su momento, y cada cosa su tiempo. Sin embargo, a pesar de que hace ya mucho que planeábamos este acto y lleva más de un año aprobado por la Asamblea General, tenemos que empezar lamentando que el momento para hacer este homenaje llegue tan tarde, y que desgraciadamente D. Alfonso se nos haya marchado sin poder estar hoy aquí presente. Aunque llegamos a barajar con él fechas esperando una recuperación de su ya por entonces frágil estado de salud, no ha podido ser. Asignatura pendiente de nuestro país en el que somos tan rápidos para criticar, al tiempo que tanto nos cuesta poner en valor las cosas bien hechas.
    Porque D. Alfonso significa mucho para todos los vecinos que tuvimos la suerte de conocerle, para nuestro pueblo, y singularmente para este Club, del que es fundador, razón por la cual la Asamblea ha propuesto y el Pleno Municipal ha decidido incorporar su nombre al de nuestro campo que pasa a denominarse CAMPO MUNICIPAL DEL HENARES “ALFONSO HENCHE”.
    Fue en la primavera de 1978 cuando llegó para hacerse cargo de las parroquias de Espinosa y Carrascosa D. José Alfonso Henche Ortiz, joven clérigo y buen deportista.
    Ahí comienza a dejar su huella en este pueblo, especialmente entre los más jóvenes, impulsando la creación de una asociación que potenciara la cultura, el ocio y el deporte y que fue el germen de nuestro Club.
    Esto ocurrió en Abril de 1979, y comenzó con un salón de baile que intentaba que los jóvenes encontraran un lugar de ocio sin tener que abandonar el pueblo los fines de semana, donde se pinchaban vinilos de la época, pues conocida es por todos su pasión por la música, y es de aquí donde se forja el carácter Cultural que forma parte de nuestro nombre.
    Durante ese tiempo D. Alfonso propuso a jóvenes que reunían cualidades futbolísticas que formarán parte de un equipo, que fue la primera plantilla que tuvo este Club, inscrito ese mismo verano de 1979 como Club Deportivo Cultural Espinosa comenzando su andadura en la temporada 79/80, portando en las camisetas el escudo que el propio D. Alfonso diseñó y que todavía hoy seguimos luciendo con orgullo en el pecho.
    Han pasado ya más de 40 años sin que este Club haya faltado nunca a su cita anual con la competición Provincial, y a pesar de los desiguales resultados, este ha sido un inmejorable lugar de encuentro para nuestros jóvenes, proponiendo un ocio saludable basado en el deporte, que reúne en cada partido en casa a un importante número de aficionados que sienten como propio a su Club, identificados con sus colores y comprometidos con su futuro, al que contribuyen económica y anímicamente, a su vez, estos jugadores son grandes embajadores de nuestro pueblo en toda la Provincia, y no son pocos los que nos han conocido gracias a este gran Equipo.
    Pero el legado de D. Alfonso se extendió mucho más allá del fútbol, además de su actividad pastoral, supo granjearse la confianza y complicidad de casi todos los vecinos, prestando especial atención a quien, en cada momento, mayor apoyo precisase, pues nada de lo que le ocurría a sus vecinos le era ajeno. Los valores que nos transmitió nos siguen acompañando hoy en día, solidos como rocas. Promovía la austeridad practicando la austeridad, el compromiso actuando con compromiso y el amor al prójimo demostrándolo cada día. Debemos lamentar las circunstancias en las que se produjo su despedida, tras 20 años entre nosotros, aunque nos alegramos porque fuera en Jadraque, un pueblo hermano y al que nos sentimos tan unidos, donde continuara haciendo tanto bien, hasta que esta primavera nos dejó para siempre.
    Hoy hacemos justicia a nuestro fundador, no a un santo, pero sí a un hombre bueno, carismático, difícilmente repetible, motor y dinamizador de un pueblo entero, al que supo ganarse y que por fin, con humildad, trata de poner en su lugar la memoria del que tanto se volcó con nosotros, con su pueblo. El Club se lo debía, el Pueblo se lo debía y él, desde allá arriba, seguro que lo está disfrutando.
    Está también escrito que nadie se muere del todo mientras que permanezca en la memoria de los vivos, y junto al reconocimiento y el agradecimiento, eso es también lo que pretendemos que suceda, que su legado siga vivo y nos sirva de inspiración sobre lo que, con voluntad, podemos hacer por nuestro pueblo, por nuestros vecinos.
    Porque el mejor homenaje que podemos rendirle es que, igual que él hizo, hagamos nosotros.
    A continuación vamos a descubrir una placa en conmemoración de este acto y hacer entrega a su familia de la que él habría recibido.
    Muchas por todo D. Alfonso, gracias a todos por asistir”


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